Páginas

lunes, 20 de mayo de 2013

In memoriam Pepe Luis Vázquez

Foto Vía:  La Fiesta Prohibida

Muchas veces, lo que uno da a entender es lo más superfluo. Pero pensándolo bien, uno se da cuenta  de que con lo superfluo no hubiera pasado  por la historia del toreo con cierta altura. Yo considero que, efectivamente, en algunos momentos me inspiraba, y tenía ese pellizco, esa cosas de torero pensando que iba a hacer un molinete, o un kiriki o cualquier cosa del repertorio sevillano; tenía que estar a otra cosa más importante, que era estudiar al toro para poderle...
Para la masa, lo que va quedando es lo más bonito, lo último, el adorno, esa cosa inconfundible de Sevilla. Pero lo profundo, lo principal, eso queda un poco más desapercibido.

Como uno no se ve del todo, lo que intenta es torear para uno. Que después sale con belleza, es una cosa que se piensa después... Pero decir que uno crea belleza, que uno va allí a crear... ¡Nada! Uno va a torear. Que la gente crea que uno va con propósito de creación, ¡mejor, amigo mío, más bonito!

Pepe Luis Vázquez en El discurso de la corrida de François Zumbiehl

No hay comentarios: