19 de marzo, día de San José, teníamos que estar en plena vorágine fallera, festiva y taurina, pero esta casi endémica pandemia nos esta modificando en exceso la vida.
Paseando por una desconocida Valencia en estas fechas, ayer me encontré con la preciosa plaza de toros de Valencia, en un día que tenía que haber sido un hervídero, estaban las luces apagadas, en silencio, y servidor fue invadido por una extraña emoción que reventó por los lagrimales.
Rememoraré una tarde del 18 de marzo del 2012 donde el león de Orduña, Dios lo tenga en su glooria, se reafirmó en lo que quería ser una figura del toreo, pero una vez más el sistema engangrenado a la Fiesta se lo escamó.
Ayer en el albero de la plaza de Valencia un torero que quiere ser algo
en todo esto dió una lección de pundonor, voluntad y valor con su
firmeza delante de dos fuenteymbros, los mejores de la tarde pero sin peritas en dulce ante los que había que estar. Iván Fandiño
apuntó muy alto, no se dejó ganar, más bien sale catapultado hacia
arriba pero con toros de los que piden firmeza y saber estar no la
babosa chochona que viene y va y admite ciento y pico muletazos. En sus
dos toros estuvo firme, variado en quites, no rehuyendo la pelea que le
presentaron, ni el viento más que molesto ni Escribiente ante el
que con tres tandas de naturales en la faena precedida de quites por
chicuelinas ceñidisimas respondidos por David Mora por unas no menos
ajustadas gaoneras, que a la postre sería de lo mejor de la tarde por su
parte. Tampoco le perdió la cara a Adulador un toro con hechuras
para embestir, que le costaba tomar los engaños pero repetidor cuando
se metía en la muleta, donde Iván mejor con la derecha nos obsequió con
dos series finales de buena colocación, ligazón y hondura para sacar los
mejores pasajes de una feria de tono más que mediocre, y como guinda el
tirarse a matar para no perder los trofeos y la salida en hombros más
que justificada. En condiciones normales tendría que salir ganador de
los premios oficiales pero aquí con las consabidas martingalas y
conspiraciones mediático-político-empresariales cualquier cosa puede
pasar, si no al tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario