Nubarrones de tormenta

Novillada de la feria del arroz de Calasparra 2014. Tarde con amenaza continua de tormenta incluso llovió una hora antes del festejo, con menos de media entrada en los tendidos, bajo presidencia condescendiente del sr.alcalde, se lidiaron supuestamente 6 novillos de Jose Luis Osborne por los novilleros Fran Gómez (oreja y ovación), Miguel Angel León (silencio y silencio) y Louis Husson (palmas y silencio).

Negras nubes de tormenta amenazaron todo el festejo acompañado de un viento molesto por momentos, toda una premoción de la novillada que teníamos por delante, todo un triste augurio del futuro de la Fiesta con unos novilleros incapaces de lidiar y dominar a unos novillos que lejos de ser fieras corrupias, eran unos mansos a los que había que dominar y llevar a los terrenos donde requería la lidia pero ni los chavales ni las cuadrillas pudieron.

Silencio a los utreros de Osborne con más que correcta presentación algunos con trapío de toro, mansos con diferentes grados de casta y raza que pusieron en aprietos en muchos momentos a los coletas, se dejaron en el caballo aunque alguno salió de naja, con mas posibilidades de faena de las que vimos porque hacia falta recursos y técnicas ausentes toda la tarde.

Silencio a la tarde de Fran Gómez que en su primero el más flojo de la tarde dio una faena al uso juliano que tras bajonazo le valió una oreja festivalera, en su segundo con una faena con búsqueda de más fundamento pasó todo un quinario para despacharlo tras varias estocadas, descabellos y puntillazos llevandose el tercero una fea voltereta y otro subalterno de otra cuadrilla un pezuñazo cuando lo estaba atronando, todo esto con la aquiescencia del presidente que perdono el tercer aviso.

Pitos al paso por la Caverina a Miguel Angel León por sus formas y maneras de estar en la cara del toro. Perfilero, abusando de pico, culo hacia afuera, eso si autojaleandose con la ayuda de los chuflas del callejón. Dejó escapar al ensabanado que hizo segundo porque evidencio unas dosis de castita.

Silencio para el novillero de Dax Louis Husson porque si no se le puede negar su disposición y actitud tampoco podemos obviar su falta de preparación y técnica mínima para presentarse a una feria de esta categoría. Pecho con un colorado con trapío de toro y con el manso que hizó sexto que buscaba chiqueros pero que se empleaba en la muleta si se sabía llevarlo.

Silencio a las cuadrillas por la tarde que nos dieron.

Leves pitos a un presidente alcalde de Calasparra que fue demasiado bonancible con la concesión de trofeos, con los avisos durante la faena, y autorizo un cambio de banderillas con sólo tres palos en la piel del toro.