Ayer tuvimos día intenso de toros y de kilómetros. Por la mañana asistimos a la novillada sin caballos de Valencia por la tarde nos trasladamos a Castellón para ver el desafío ganadero Victorino-Cuadri.
En la matinal los erales fuenteymbros nos decepcionaron por completo ante un encierro inválido, manso y descastado salvándose el último al que no pude ver por premuras en el tiempo para viajar.
Los novilleros poco pudieron hacer ante semejante material.
Cristian Climent tuvo un lote imposible aunque debe de mostrar más recursos un novillero con bastante experiencia por estas lides.
Jorge Expósito sólo pudo hacer algo con su segundo donde se marcó una tanda por la izquierda de calidad pero nada más. Debe corregir defectos de colocación y de manejo de las telas para poder subir escalones.
Vicente Soler estuvo en novillero, con poco paladar en su toreo pero mucho repertorio de galería, del que calienta los tendidos, le valió la puerta grande.
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