Con los ecos de lo ocurrido por el anfiteatro de Nimes, en Albacete tuvo lugar una corrida de las llamadas 'toristas' de muy diferente presentación seguramente a los animales salidos de chiqueros al ruedo francés horas antes.
Los de
Adolfo Martín tuvieron una presentación impecable, muy diferente al comportamiento que mostraron en el ruedo, con poca casta y muy poca entrega, no humillaron y con poquísima transmisión, alguno parecía con posibilidades pero se desengañaban y orientaban a mitad de lidia, pasaron justos por el tercio de varas a excepción del sexto que apretó en su primera vara, aunque fueran aplaudidos incomprensiblemente en el arrastre, dejaron muy pocas posibilidades a los dos toreros que formaban una mano a mano en el cartel.
Javier Castaño pasó el compromiso sin muchas posibilidades por sus tres oponentes pero sin mostrarse muy metido en la corrida, parece que empieza a pesarle la temporada siempre enfrentándose a toros de hierros de los que tienen mucho que lidiar y que algunas figuras
gedieses no verán en su vida.
Sergio Serrano, torero con muy pocas corridas desde su alternativa, no se le puede reprochar su voluntad y disposición ante los
adolfos, cortando una oreja a su primero por encontrarle el sitio, torearlo sin dudar y despacharlo de una buena estocada, pero también se estrelló contra sus otros dos oponentes especialmente contra el sexto un toro de imponente presentación por delante, pero que buscaba a media altura olvidándose de la muleta.
Destacaron
David Adalid, lo cual no es noticia, y
Basilio Mansilla con los palitroques, olvidándose de las dificultades de sus oponentes.
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Entrega por partida doble |
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Disposición de Serrano |
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Oreja de ilusión |
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La merienda del torilero |
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Los cuernos que no se vieron en Nimes |
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