Páginas

lunes, 4 de abril de 2011

Victorinos en Castellón: con estos mimbres pocos cestos


Último festejo de la feria de la Magdalena en Castellón. Toros de Victorino Martín para los diestros Rafaelillo (ovación - oreja), Luís Bolivar (silencio - oreja y petición) y Alberto Aguilar (oreja - palmas).

Tarde con el cielo encapotado sin viento, con 2/3 de aforo en los tendidos, donde se encontraban aficionados catalanes que desplegaron pancartas al inició de la corrida al grito de ¡Libertad, Libertad!.
Presidencia bonancible pero supo aguantar una petición de una segunda oreja al 5º impropia para lo visto en el ruedo.
¡Libertad!, ¡Libertad! 

Cuando asistes a una corrida con este hierro siempre buscas la emoción y el interés que tantas tardes falta en la Fiesta, pretendes ver toros encastados, que transmitan, con fuerza, dentro de diferentes comportamientos pero cuando las dosis de estos elementos son bajas o no existen sientes vacío e inanición. Los victorinos presentaron una morfología que en algunos ejemplares parecían más propias de otro encaste, rematados de culata, con morrillo pronunciado, todos agapachados de cuernos, con la extraordinaria coincidencia de haber nacido en el enero del 6, todo con aire de prueba genética.
Flojos de fuerzas, de justita presentación por delante, con peso, en varas cumplieron con el monopuyazo a excepción del 6º que hubiera recibido un segundo de no haber sido por la inoperancia del picador, ninguno humilló en exceso entre otras cosas porque su poder físico no lo permitia. El 1º regordío, cortaba el viaje más por la falta de fuerzas que por las malas intenciones, el 2º  tras sufrir dos volteretas se paró y se dejo estar, el 3º con poder fue a más tras pasar de puntillas por el primer tercio, el 4º con embestida boyante venia de largo, con buen pitón izquierdo, pedia faena de pases largos, el 5º casi inválido pero con una embestida de mucha calidad por los dos pitones, el 6º que se empleo en una vara muy larga y trapera y pedía volver a entrar, se paró al acusar el exceso del monopuyazo.

Rafaelillo, torero para toros dificiles y buscadores, para entablar pelea con él, sorteo un primero que cortaba el viaje pero sin ser tobillero y de malas artes si no más bien por su condición de invalidez, se justificó. En su segundo tuvo un toro para pases de trazo largo con poder pero las condiciones del torero no permitieron darle la lidia que el animal requería. Recibió una orejita tras pinchazo y estocada.

Luis Bolivar, que en estas corridas se acompaña de franelas de gran tamaño y acusa demasiado el perfilismo, tuvo en suerte a un primero que no tuvo transmisión y despachó con 2 bajonazos, para enfrentarse a su segundo un toro, que brindó a los aficionados catalanes con lo que se metió al respetable en el bolsillo, con poquísimas fuerzas pero con mucha calidad en la embestida supo mantenerlo sacando pases a media altura con lo mejor al final de la faena que le valió otra oreja y una petición impropia para la faena que habiamos visto con una estocada trasera.

Alberto Aguilar, que hizó el esfuerzo de torear con todavía la herida de Valencia fresca en su pierna, no se vió a la misma altura que estuvo en la capital del Túria, en su primero un toro que fue a más no llegó a someterlo y aunque no se le puede reprochar ni esfuerzo ni colocación al toro no llegó a someterlo, sufriendo un desarme que lo desarboló sin volver a acoplarse, tras una estocada trasera paseo una oreja más que justita. En su segundo se paró al llegar al último tercio inició la faena con la zurda en la que no se acopló para paserla a la diestra donde extrajó unos pases sin más, abreviando y entrando a matar con una estocada en lo alto pero que no entró lo suficiente para despachar al animal necesitando 4 descabellos para caer.

No hay comentarios: