División de Opiniones: El triunfo de Román y los regalos de Peris

lunes, 8 de octubre de 2012

El triunfo de Román y los regalos de Peris

Novillada de la Feria de la Comunitat. Con un cuarto escaso de plaza, en tarde calurosa, preside el sr. Peris de fácil soltura con el moquero a la hora de conceder trofeos, se lidiaron novillos de Parladé y uno de Juan Pedro Domecq, descastados y noblones en general, para los novilleros Jesús Duque (oreja y ovación), Juan Leal (leve petición y silencio) y Román (oreja y dos orejas).

Pitos: Para una presidencia muy ligera a la hora de conceder trofeos fáciles en exceso congratulando a los del autobús, dando en el último toro dos orejas de golpe sin esperar la petición, dejando el nivel de exigencia del palco a una altura baja.

Silencio: A los novillos artistas de la casa Juan Pedro Domecq, cinco con el hierro de Parladé y el cuarto con el titular de la casa, de presentación aceptable, descastados, noblones, con pocas fuerzas, permitieron estar delante de ellos pero no transmitieron emoción a los tendidos.

Palmitas: Para el requenense Jesús Duque, con disposición pero con muchos defectos tirando de toreo de galería pero nada de fundamental, mucho pico con muleta retrasada, eso sí acabo con los circulares de rigor, cortando trofeo por las ganas del paisanaje con la aquiescencia del palco.

Silencio: Al novillero francés Juan Leal, de valor firme, muleta templada pero muy frío en la ejecución sin llegar a los tendidos, ejecutando un toreo de excesivas cercanías que acabó por ser soporífero.

Ovación: Al valenciano Román, que tras una temporada con bastantes novilladas en el esportón, mejora adecuadamente, tiene valor, disposición, zapatillas asentadas, adelanta la muleta, baja la mano, disfruta del toreo con la zurda, incluso cuando el novillo no lo permite, pero interpreta en exceso defectos del toreo moderno como retrasar la pierna contraria, no cargar la suerte, codilleo, modos de torear que salen de los mentores de la escuela de Valencia. Lo mejor de la tarde un quite ajustado y la estocada a su segundo.

Pitos: Para los del castoreño, toda la tarde picando trasero, a la paletilla y haciendo en dos novillos desgarros impresentables, ejecución horrorosa del tercio de varas.

Ovación: A los banderilleros Francisco J. García, Juan Carlos Donaire, José Manuel Montoliú, y Raúl Martí que se tuvieron que desmonterar tras buenos pares de banderillas. A los que en ocasiones se apuntaron los terceros sin merecerlo.