Morir es una suertecomo vivir: ¡de qué!, ¡de qué manera!supiste ejecutarla y el berrendo.
Tu muerte fue vivida a la torera,lo mismo que tu vida fue muriendo.
No: a ti no te distrajo,el tendido vicioso e iracundo,el difícil trabajode ir a Dios por la muerte y por el mundo.
Tu atención sólo han sido toro y ruedo,tu vocación el cuerno fulminante.
Con el valor súblime de tu miedo,el valor más gigante,la esperabas de mármol elegante.
Te dedicaste al hueso más avieso,que te ha dejado a ti en el puro hueso,y eres el colmo ya de la finura.
CITACION-fatal, Poemas sueltos,
Miguel Hernández
En el día que hubiera cumplido cien años el poeta del pueblo, aunque ha muchos le moleste Miguel Hernández era aficionado a los toros, y así le cantó a la muerte de Ignacio Sánchez Mejías, instigador de la generación del 27.
No hay comentarios:
Publicar un comentario