Regresado a mi Valencia natal y presenciada la feria en la
Maestranza, siento la necesidad de escribir lo siguiente:
Sevilla preocupa.
Sevilla está “herida” (en el 2014, dije “triste”), la Maestranza, está “tocada”. Pasar de 8000 a 2000 abonados, hace perder la identidad a cualquier Plaza y la Maestranza ha perdido su esencia. Sus silencios ya no son tales y su buen valorar ha desaparecido. Se ha impuesto el criterio del público no aficionado.Reconducir la situación, no va a ser fácil. Los mas fieles, están-estamos preocupados, no queremos perder la ilusión, pero esta disminuye.Ese incomparable marco se merece ,mucho mas.Agustin ColomarUTAV Valencia
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