Esta será mi Feria de Julio

CERET DE TOROS 2014
realizado a partir de una obra de Claude Viallat.

Esta será mi feria de julio, más viendo la publicación, en el medio oficial de los productions, de los carteles de la feria de Julio de Valencia, la que molesta, la que hay que ir exterminando lenta e inexorablemente, la feria de las rebajas de los productions que esperaban al pétreo de Galapagar, al mesías que llena las arcas de las taquillas pero sobre todo las suyas. 

Servidor tendrá que emigrar a Francia, a la Catalunya francesa, al Rosellón, a Céret, donde no tienen complejos, ni independentistas acomplejados ni impera la ley del taurineo patrio donde mandan figurines y calamandurrios de pro.

TOTAL por lesfondusdelimage

Pero aquí no pasa nada, los productions han conseguido en esta plaza comprar muchas voluntades de los que podían hablar, de las asociaciones creadas para acallar las que tenían voz, que  se venden por un cocktail rancio como su afición, la de unos piji-jóvenes que representan a muy pocos de los aficionados que en esta santa tierra se colocan delante de morlacos que el pregonador de orejas de Velilla o el barbillero de la Puebla del Río no verán ni en las revistas, con un presidente que es a la vez redactor del ente que propone y dispone con el omnipotens director a su cabeza. 

Por no hablar de los que dicen que son la voz y el sentir de la afición, abrazafarolas y estirachaquetas que se venden por anuncios en sus medios, que no son ni un cuarto, cuando no por dos gintónics de garrafa en la production's carpa y una entrada en el callejón del coliseum nimeño, patria chica del artista productor, donde el advenedizo de Galapagar tiene que sentar cátedra ante los torillos buscados y rebuscados por veedores y calamandurrios del taurineo.

Capítulo aparte merece el diputado servil de Asuntos (anti)Taurinos, que más que defender a su afición se ha dedicado a complacer a todos los requerimientos y designios del equipo de los productions, que no ha tenido vergüenza en defender y aparecer como empresa siempre con su amiguito inseparable, a cambio de algo indefinido, porque como aquí ni la prensa (pesebrera) especializada se dedica a investigar (¿para qué?) ni una oposición política que debe estar a la sombra de un almendro y luego dirá que ellos estaban en ello, mientras el barbilanpiño campa a sus anchas, aunque sus ideas sean estrechas.

Por eso servidor, que sigue buscando el Toro, con mayúsculas, pasa de taurineos peloteros y zafíos, tendrá su feria de Julio en Céret, aunque no niega que asistirá a alguna novillada y la corrida de los cuadris, si se celebra, porque como dicen mentes preclaras ya veremos si hay pasta para amortizarla y no la echan para atrás con la connivencia de la autoridad que no sabemos bien de que lado está, aunque muestran tanta afinidad con el productor, por su gran obra realizada en esta tierra que quedará como un erial el día que desaparezca, porque no hay mal que cien años dure.