Corrida-concurso entretenida

 

Entretenida corrida-concurso la de ayer en Zaragoza, así es como se puede valorar el festejo celebrado ayer en la capital del Ebro, donde hubieron cuatro toros interesantes con matices sin llegar a ser extraordinarios y donde cada matador dejó muestras de a lo que había venido dejando evidencias de alguno no saber donde se encontraba, ir a lo suyo montando el festival, sin preocuparse del toro que era el verdadero protagonista de la tarde. Lo de los premios como siempre es otro cantar.

Corrida-concurso de Zaragoza 2014. En tarde lluviosa en el exterior, protegidos por la cubierta más de media plaza de espectadores, bajo presidencia correcta se lidiaron toros de diferentes hierros, por orden de antigüedad de los mismos, por los matadores Antonio Ferrera (ovación por su cuenta y silencio), Javier Castaño (silencio y vuelta tras leve petición) y Paulita (palmas y palmas).

Silencio para Ultraje-139 de Zalduendo (2,5). Toro con mala suerte en el sorteo, tan sólo lo pusieron en suerte 2 veces, pudiendo haber entrado otro, pero su matador racaneo.

Palmas a Artillero-26 de Cuadri (2,7). Recibió 4 varas sin emplearse a fondo y sin colocarlo a las distancias correctas, de menos a más, tras cumplir en banderillas, se hizó el dueño en el último tercio llegando a él con poder. Aplaudido en el arrastre, ganó el concurso incomprensiblemente por mi parte.

Palmas a Pianero-106 de Alcurrucén (2,5). Entró cuatro veces al caballo con alegría, siempre bien colocado dando las distancias desde donde arrancaba de menos a más, siendo la última más allá de la bocana de riego, cumplió en banderillas, pero se paró en el último tercio.

Palmitas a Horquillón-34 de Adolfo Martín (2,4). También tuvo mala suerte en el sorteo, recibió tres varas pero abundantes y sangradoras, se arrancó con prontitud, lo acusó en banderillas y llegó muy parado al último tercio.

Ovación a Hostelero-123 de Fuente Ymbro (3,2). Toro que fue con prontitud tres veces al caballo, apretando, levantandolo y derribandolo en la tercera vara, al parecer hiriendolo al jamelgo, por lo que no se pudo volver a poner en suerte. Con transmisión en banderillas, llegó a la muleta con poder y transmisión donde su matador se equivoco cerrandolo demasiado para lo que presentaba el toro y acusándolo al final del trasteo. Toro con mala suerte en el sorteo, que no le permitió ganar el concurso pese a ser el toro más completo para servidor. Aplaudido en el arrastre.

Silencio a Barqueño-95 de Alcurrucén (1,6). Sustituía a Claruco-16 de Ana Romero devuelto por falta de fuerza. Sólo entró dos veces al caballo y llegó al último tercio sin emplearse ni con transmisión.

Silencio al egoísmo de Ferrera que tenía que tener más claro que es anunciarse en una concurso, donde racaneo con los toros y se pegó el festival con susto incluido en sus segundo toro en banderillas, para las faenas de muleta ser marca de la casa, inició con medios pases para dar las últimas tandas con pases suaves pero sin profundidad.

Silencio a Castaño que aunque intentó estar en lidiador nunca coloco bien a sus toros en el caballo no dando las distancias adecuadas, siendo generoso con su cuadrilla siendo parte del espectáculo, pero con muchas precauciones con el cuadri y no meterse en ningún momento con él, y no toreando en los centros del ruedo a un fuenteymbro que tenía una embestida franca con tranco.

Silencio para Paulita, aunque dejó siempre muy bien colocados a sus toros en el caballo, especialmente a su primero permitiéndole el lucimiento del animal, pero no tuvo opciones en el trasteo de la pañosa, y con menos posibilidades con el descastado sobrero con muchas precauciones.

Ovación al picador Juan Manuel Sangüesa, por un gran tercio de varas, y a la cuadrilla de espartanos, David Adalid, Fernando Sánchez y Marco Galán por los dos tercios de banderillas ofrecidos, especialmente con el toro de Cuadri para dejar en mal lugar a aquellos que dicen que son difíciles de banderillear.

Palmas a Tito Sandoval, por su profesionalidad, y también a la cuadrilla de Paulita compuesta por Fernando Téllez, José Antonio Carretero (el que tuvo retuvo) y Manolo de los Reyes.

Pitos a los dos picadores de Ferrera, Alonso Sánchez y Dionisio Grillo por las varas traperas y sangrantes que perpetraron.

Silencio a la corrección del palco presidencial, aunque demoró demasiado la devolución del sexto toro.

Aplausos a la intervención de los alguacilillos y al delegado gubernativo por la intervención para amonestar a uno de los productions de pelo cano que se permitió ir a mandar a un picador en un momento dado por su cuenta pensando que podía campar a sus anchas como por estos lares.